Ozono y desinfección: seguridad y precauciones de uso
La desinfección con ozono es un método efectivo y versátil para eliminar gérmenes, virus y bacterias en diversas aplicaciones, desde la purificación del aire hasta la desinfección del agua. Sin embargo, algo que no muchos suelen mencionar es que un uso incorrecto del mismo puede representar riesgos no solo para la salud, sino también para el medio ambiente. Es por eso que en este artículo, exploraremos las medidas de seguridad y las precauciones necesarias al utilizar ozono y desinfección industrial.
Precauciones del ozono y desinfección industrial
El ozono puede reaccionar con ciertos materiales, deteriorándolos con el tiempo. Es por eso que como primera recomendación, deberás asegurarte que los materiales en el entorno sean compatibles con el O3 o protegerlos adecuadamente. Es importante destacar que, aunque sea un poderoso agente desinfectante, no es eficaz en la eliminación de contaminantes químicos. No se debe depender exclusivamente de su uso, aunque eso no quita que sea capaz de erradicar a nivel molecular una gran variedad de gérmenes, microbios o patógenos hasta en un 99%.
Otras precauciones que deberás tomar con el ozono y desinfección en ambientes industriales como el alimentario, agrícola o farmacéutico son:
Protección personal
Antes de manipular equipos generadores de ozono o llevar a cabo procesos de desinfección, asegúrate de utilizar el equipo de protección personal (EPP) adecuado. Esto incluye gafas de protección, guantes y, en algunos casos, una mascarilla facial para evitar la inhalación directa de ozono.
Ventilación
Cada sesión de desinfección maneja sus tiempos debidos, es por eso que el ozono puede ser perjudicial si se inhala en concentraciones elevadas. Siempre opera los generadores en áreas bien ventiladas para evitar la acumulación de gas. Asegúrate de que haya un flujo constante de aire fresco para diluir cualquier concentración peligrosa.
Concentraciones seguras
Sigue las recomendaciones del fabricante en cuanto a las concentraciones de ozono y desinfección adecuadas en función de la aplicación específica. Evita el uso de concentraciones excesivas que puedan ser dañinas. Según el tamaño de los ambientes, este puede tomar entre 20 a 40 minutos y en caso de purificar agua, de 40 a una hora.
Monitoreo continuo
Durante el proceso de desinfección, se realiza un monitoreo constante de las concentraciones en el ambiente para garantizar que estén dentro de los límites seguros. Los detectores de ozono son herramientas útiles para este propósito.
Desocupación temporal
En aplicaciones de desinfección de espacios interiores, como habitaciones u oficinas, se recomienda desocupar temporalmente el área durante el proceso de tratamiento para minimizar la exposición de las personas al ozono.
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